Descripción
Desde el inicio del gobierno de Juan Manuel Santos, se ha hecho evidente un cambio en el discurso presidencial sobre el actuar de los defensores de derechos humanos y las víctimas, especialmente contrastadas con los sistemáticos señalamientos y estigmatizaciones que caracterizaron los anteriores gobiernos de Álvaro Uribe Vélez.
Ante estas actitudes políticas, se podría esperar que la situación de agresiones contra víctimas, defensores y defensoras de derechos humanos cesara, o al menos disminuyera. Contrariamente, varias fuentes han mostrado cómo esta situación se viene agravando durante el período presidencial de Juan Manuel Santos en comparación con el último periodo del Álvaro Uribe.
Así lo evidenció el Programa Somos Defensores en su informe semestral, en el cual menciona que en lo corrido del primer semestre de 2011, han sido asesinados 29 defensores de derechos humanos y líderes sociales en el país, mientras que tres más han sido desaparecidos.
Esta situación de violencia contra las y los defensores ameritó un pronunciamiento de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos el 8 de marzo de 2011, quien expresa su preocupación por las amenazas contra defensores de derechos humanos por parte de las “Águilas Negras”. Es de precisar que ante esta instancia algunas de las organizaciones y personas cuentan con medidas cautelares como es el caso del MOVICE.
Estos hostigamientos se continúan realizando a través de la estrategia paramilitar, lo cual revela su vigencia. Dichas estructuras paramilitares han logrado mantener su control territorial gracias a la connivencia de mandos militares y policiales, sectores políticos y empresariales del orden regional y nacional.